Prensa Cadef.- El Centro de Acción y Defensa por los Derechos Humanos (Cadef) fortaleciendo la labor del grupo de solidaridad de la organización, visitó el Hospital Joaquina de Rotondaro ubicado en Tinaquillo, estado Cojedes, con el objetivo de tender una mano a las personas más afectadas por la emergencia humanitaria compleja que atraviesa Venezuela en específicamente en el área de alimentación y que se encuentran recluidas en dicho centro hospitalario.
La actividad se llevó a cabo el pasado domingo 30 de abril, cuando la coordinadora del programa “Chamo Solidario” Vanesa Peroza, el coordinador de Cojedes José Arce y la directora ejecutiva de la organización Adriana Pérez, visitaron el área de pediatría y de traumatología para llevar alimentos a las personas que estaban hospitalizadas y que son de escasos recursos.
Esta labor nace de la iniciativa anual 2017 de Cadef, denominada “Jóvenes jóvenes por una sociedad +Humana” y que se mantiene en la iniciativa actual “Jóvenes Reconquistadores de la Sociedad” como parte de la labor de responsabilidad social que lleva la organización, pese a los obstáculos que surgen en la tarea de ayudar a quienes más lo necesitan.
Dicho programa se mantiene activo en Carabobo y en Caracas, actualmente se estrechan alianzas y fortalece el voluntariado para que Cojedes se pueda integrar.
Cabe resaltar que la crisis venezolana se agrava más con el paso de los días y una gran cantidad de ciudadanos han sido muy afectados, sobre todo en el sector alimenticio y de salud, y que por la interdependencia de los Derechos Humanos estos están estrechamente relacionados con el Derechos a la vida.
Desde CADEF, y como propulsores del asociativismo de juventudes hacemos un llamado contundente a las autoridades para que asuman con prontitud la responsabilidad frente a la escasez de medicamentos, insumos médicos y alimentos evitando más muertes por desnutrición y demás factores.
Es necesario el diseño de políticas públicas que involucren a todos los sectores públicos, privados y demás organizaciones de la sociedad civil.
Los pacientes de todos los hospitales públicos deben tener al menos una alimentación digna y ser atendidos de la mejor manera posible, muchos los médicos residentes del Hospital Joaquina de rotondaro son jóvenes que día a día hacen el mayor esfuerzo por brindar un servicio acorde, pero las limitantes que tienen los imposibilita al realizar sus labores.
Es realmente preocupante lo precario de la actualidad y el día a día del Hospital Joaquina de Rotondaro (al igual que la gran mayoría de los centros de salud en Venezuela); podría calificarse como insalubre e inhumano, y de seguir así puede tener consecuencias devastadoras en la comunidad tinaquillera.
La juventud reclama una vida digna para todos los venezolanos.
